El truco del papel higiénico para eliminar los malos olores en la nevera

Con el paso del tiempo, es normal que la nevera se impregne de malos olores, sobre todo si alguno de los alimentos que guardas en ella se estropea. Por este motivo, es tan importante limpiar el frigorífico con frecuencia, utilizando los productos adecuados.Claro que hay algunos olores de la nevera que no se eliminan ni siquiera con este tipo de productos, y aquí es donde entra en juego el truco del papel higiénico. Un truco casero tan sencillo como efectivo ya que el papel higiénico absorbe muy bien los malos olores ya que se compone de celulosa.

Adiós a los malos olores en la nevera con el truco del papel higiénico

Aunque procures una buena limpieza del frigorífico, es inevitable que los alimentos desprendan olores, sobre todo el pescado, la carne y la fruta, así que te contamos en qué consiste y cómo poner en práctica el truco del papel higiénico.

Podríamos decir que este es el truco casero más fácil del mundo ya que simplemente tienes que colocar un rollo de papel higiénico dentro de la nevera. En un par de días, verás cómo ha recuperado su aroma original y los olores desagradables han desaparecido como por arte de magia.

En vez de utilizarlo como un truco puntual, también puedes tener siempre un rollo de papel higiénico dentro de la nevera para que absorba los malos olores. En este caso, tienes que cambiarlo cada dos semanas.

¿Cómo desinfectar el frigorífico?

Más allá de la limpieza, la desinfección también es muy importante. Hay que tener en cuenta que el interior de la nevera es un ambiente idóneo para la proliferación de microorganismos.  En las paredes y en los comportamientos se van acumulando residuos de alimentos que a su vez pueden contaminar otros alimentos, y acelerar su proceso de descomposición.

Para evitarlo, te recomendamos poner en práctica una o dos veces al mes esta solución casera a base de bicarbonato de sodio. Los ingredientes son muy simples: tres cucharadas de bicarbonato de sodio y dos tazas de agua templada.

Mezcla ambos ingredientes, sumerge una esponja en el líquido y frótala sobre las paredes y los compartimentos del frigorífico. Deja que actúe durante cinco minutos y, una vez transcurrido el tiempo, retíralo con un paño absorbente.

Como puedes comprobar, no es necesario que te gastes mucho dinero en productos de limpieza para mantener la nevera impecable. Hay trucos caseros tan sencillos como efectivos con los que puedes conseguirlo.